Un marino algo ignorante que llevaba años en
alta mar, vuelve a su hogar y descubre sorprendido que tiene un hijo
negro. Debido a que era totalmente blanco le pregunta a su esposa:
- Pero... ¿Cómo es posible que tengamos un hijo negro si yo soy blanco y tu también?
- Bueno, como no tenía leche, tuve que buscarme una señora para que
amamantara al niño, y como ella era negra, el niño se puso de ese color.
El marinero, no muy convencido, decide ir a consultarlo con su madre. Le cuenta la historia y la madre responde:
- Claro que puede ser, fíjate por ejemplo en ti mismo, de pequeño te dí
leche de vaca, y mira que lindos cuernos te están saliendo, imbécil
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